«El Nariz» estudió Derecho en la UNL y fue empleado del Banco Provincial de Santa Fe. Comenzó su militancia en las FAR. En 1971 se casó con Norma Valentinuzzi y tuvieron dos hijos, Juan Facundo y María. Militaron juntos en la Juventud Peronista y en la organización Montoneros. Horacio llegó a ocupar la conducción de la Comisión Gremial interna del banco.
En 1975, después de varios hostigamientos por su militancia, se mudaron a Rosario y posteriormente a Caseros en la provincia de Buenos Aires. El Nariz tenía una natural simpatía, una «sonrisa gardeliana» y amaba a su familia. Estas características junto a su compromiso con la causa de los explotados y su ejemplar actitud durante su cautiverio hicieron de él un valioso y estimado cuadro revolucionario y entrañable compañero.
El 15 de febrero de 1977 fue secuestrado y llevado al CCDTyE ESMA. Trece meses después se fugó y se reencontró con su familia con la que vivió clandestinamente. En ese lapso, realizó llamadas a la ESMA con un mensaje para el «Tigre» Jorge Acosta y demás responsables: «va a haber un Nüremberg para Uds.». Redactó un documento denunciando y describiendo con detalles el funcionamiento del centro clandestino, las mecánicas de tortura, cautiverio y desaparición, los vuelos de la muerte. Dibujó planos e identificó a secuestrados y represores. Fue entrevistado por Associated Press reiterando sus denuncias. La entrevista fue publicada en los principales diarios del mundo.