noticias

En un contexto en el que todo se volvió virtual, desterritorializado e intangible, Abuelas de Plaza de Mayo y la CONADi (Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad) entendieron la urgencia de unificar la imagen de la Red por el Derecho a la Identidad, para potenciar, desde lo visual, las decenas de actividades desperdigadas por la Argentina y el mundo.

Abuelas de Plaza de Mayo y la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (CoNaDi) presentan la imagen institucional de la Red por el Derecho a la Identidad, luego de un año de trabajo virtual de fortalecimiento y expansión, en el que se logró la regionalización y la suma de tres nuevos nodos. Las ciudades de Gualeguaychú, en Entre Ríos; la capital de Corrientes; y Punilla, en Córdoba, ya cuentan con sus referentes para evacuar consultas sobre la búsqueda de nietos y nietas apropiados/as en dictadura. La Red por la Identidad funciona actualmente en 38 ciudades, cuatro de ellas del exterior.

A través de encuentros mensuales y reuniones regionales lideradas por las filiales de Abuelas de Plaza de Mayo, los nodos de la Red por el Derecho a la Identidad protocolizaron las consultas, evaluaron estrategias de búsqueda y se capacitaron en diversos temas para seguir acompañando la búsqueda de nietos y nietas en pandemia. En el mismo sentido, en un contexto en el que todo se volvió virtual, se pensó en la urgencia de unificar la imagen de la Red por el Derecho a la Identidad, para potenciar, desde lo visual, las decenas de actividades desperdigadas por la Argentina y el mundo.

La Red por el Derecho a la Identidad surgió en 2003, luego de dos años de viajes sostenidos por las provincias argentinas para, por un lado, dar difusión a la búsqueda de los y las nietas apropiadas en dictadura; y por otro, conformar un colectivo diverso y heterogéneo para acompañar esta lucha en cada localidad. En 2004, se realizó el primer viaje al exterior en el que se conformaron, primero, los nodos de España e Italia, y más tarde en Francia y también en Canadá/Estados Unidos.

La Red nació en un contexto bien distinto al actual, cuando las Abuelas recién iniciaban la convocatoria a sus nietos y nietas a que fueran partícipes de su propia búsqueda, y los derechos humanos y el derecho a la identidad aún no eran políticas de Estado. En 2003, las consecuencias de la crisis de 2001 todavía se sentían. Por entonces, las dificultades económicas hicieron pensar a las Abuelas que a muchos jóvenes con dudas les sería difícil acercarse. Así, fueron a buscarlos. Además, en cada lugar construyeron alianzas con instituciones y personas que se comprometieron con la restitución de una generación. De esta forma, se inició la Red por el Derecho a la Identidad que, sostenida por la militancia y solidaridad de quienes la integran, sigue generando actividades y se constituye en el puente inequívoco entre Abuelas de Plaza de Mayo y la CoNaDi, y todas aquellas personas con dudas sobre su origen o con información sobre posibles hijos e hijas de desaparecidos.

Mucho se avanzó en estos 17 años, y aunque de 2003 a esta parte se han resuelto 60 casos, aún restan casi 300 nietos y nietas por encontrar: hombres y mujeres de entre 40 y 45 años que pueden estar viviendo en cualquier rincón del país o del mundo. Por eso la labor de la Red se vuelve indispensable. Este año el compromiso de los y las integrantes de la Red por el Derecho a la Identidad se redobló. Sostuvieron el espacio en la virtualidad e incorporaron herramientas para poder asistir en este escenario pandémico a cualquier persona que sospeche ser hija o hijos de desaparecidos.

Para que quienes tengan dudas o información, es importante que acudan a la Red en sus localidades, que son nuestros representantes más genuinos y capacitados. A ellos y ellas, nuestro agradecimiento y la seguridad de que solo el trabajo colectivo nos permitirá seguir encontrando a los nietos y nietas que faltan.